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viernes, 21 de junio de 2013

#BoycottBahama Un emprendimiento que merece ser conocido e imitado



#BoycottBahama  Cuban SOS 20/6 ¿Qué fue? ¿Qué le aporta al ciberactivismo cubano y la sociedad civil?


Yo definiría a #BoycottBahama como un pico, una raya alta que se muestra en una cuadro estadístico, una onda de sonido que viola el umbral del dolor. Un pico. Una reacción en cadena, un manido efecto mariposa. Una cima. La masa opositora en reacción. Algo que pasó. Un mito. Un rasguño en el mar de las datas. Nada. Una energía sin ínfulas de grandeza, sin ánimo de pretender ser más de lo que fue. Sencillo, claro, limitado pero sorprendente.
Las violaciones de los Derechos Humanos en Bahamas y sus centro de detención para inmigrantes ha llegado también a un estado limítrofe, pero no es de ahora, sucede desde hace muchos años, periódicamente, como si fueran ciclones tropicales del abuso de poder. Muchos cubanos tratando de salir del país han escogido esa ruta. Un sendero agrio. El mar y la violencia. Siempre fue así. Este estado independiente de la Mancomunidad Británica de Naciones sostiene unas relaciones bilaterales bien estrechas con la República de Cuba. No entendemos, entonces, cómo dentro de esta relación tan acoplada no se hayan sentados estos dos “gobiernos” a discutir los sucesos que han conmovido a la comunidad internacional. Salió un video donde se mostraban a los guardia golpeando ferozmente a un grupo de detenidos en un centro de Nassau. La primera reacción fue decir que este documento era un montaje; no era real. Una bajeza política de esas que abundan a diario y nos vuelven inmune al descaro de la justicia que se esfuma en medio del dolor de los que están siendo abusados sin haber cometido delito alguno. Muchos de los hombres, mujeres, adolecentes, ancianos, niños que se encuentran esas mazmorras de tortura posiblemente son seres honrados, emprendedores… seres con una vida, con un pasado, con recuerdos, con logros y fracasos, pero al entrar a esos campos de concentración solo son “víctimas”. El supuesto Gobierno de Cuba presidido por Raúl Castro, en su indolencia no ha mostrado ni un mínimo de misericordia y amparo por sus ciudadanos, ni un poco.
Lo que los cubanos no sabemos es que sin querer, casi como una programación neurolingüística, repetimos los modelos de comportamiento de lo gobiernos, especialmente de los totalitaristas. Sí, porque eso es lo que han anhelado, preciosamente, la dictadura ideológica de la nomenclatura verdeolivo: que seamos INDEFERENTES. Que seamos INDOLENTES. Que cuando nos hablen de Cuba y de nuestro coterráneos asqueemos como cuando un vómito está por salir, que practiquemos el rechazo. Se gozan cada vez que le damos la espalda, en nuestra cobardía inoculada, a un hermano. Cuando somos una jauría de lobos antropofágicos, practicadores de un canibalismo social. Ese “hombre nuevo” no era más que aquel que los apoyaría ya que no busca su propio bienestar sino la desgracia ajena.
Mas algo pasó. Yo definiría a #BoycottBahama como un momento de dolencia absoluta, de preocupación colectiva, de humanismo tangencial, de un cubano despolitizado o más bien de una humanización de la política. Nada importa más que esos cubanos que se han cosido la boca. Para una mujer cubana presumida y coqueta ¿qué es más importante que las belleza de sus labios? Sin embargo, ellas se los han cosido. Un candado de hierro atraviesa la boca de otro hombre. Los golpes se ven en todo el cuerpo. Hay niños, pequeños inocente allá adentro. Y nuestras mujeres que habitan ese infierno hace más de medio año, seguramente son violadas sexualmente. Violadas por un hombre, por dos.. sabe Dios con qué frecuencia. Allí están, esos rostros que pudieran ser el primo, la madre, la hermana, el abuelo, la abuela, el padre, nuestro esposo, nuestra novia, nuestro hijo…
Poco a poco la masa opositora, esa anónima, esa de todos los días. La que habita en el exilio y paga sus ‘billes” y aún así  se dedica a dar un “share”, un “like” a lo que pasa de ese no-lugar que es Cuba. Esa masa se ha ido moviendo. Vimos protestas con camiones y activistas principalmente del Movimiento Democracia en la Ciudad de Miami.  Se iba pronunciando todo poco a poco. Si somos sinceros, ya digo que nuestra capacidad de no  aprehender el dolor ajeno, el pensar que siempre es una exageración, no nos había permitido ver la gravedad del asunto. Pero una pequeña bola de nieve hace la tormenta. Somos, simplemente, copos de nieve.
20/6
El día 20 de junio de 2013, en la mañana, una cubana al sentirse impotente de no poder estar, ni si quiera en Miami. Cansada de un activismo pasivo y contemplativo. Quiso hacer algo, algo que fuera un poco más allá. Donde la presión se acumulara y creara un bomba lógica. Ella recordó que por cuestiones de la vida cruzó frontera, que en Nicaragua el propio Ejercito Socialista que comanda Daniel Ortega, sí esos mismos, le pusieron una Winchester en la cabeza a su novio porque los militares le llamaban “bonita” mientras tomaban su tiempo para tocarle los senos, “tú sí que estás bonita” y el novio rebelde se le abalanza: “A mí hay que matarme”, por suerte y gracias al Señor, nada pasó. En Hondura una 21 estuvo tan cerca de su frente que tenía aguantarse las piernas para que no se dieran cuenta de que estaba temblando. Es terrible, algo que te cambia la vida. Al recordar todo esto pensó simplemente que se iba a pasar todo el día llamando al Consulado de Bahamas en Miami todo el día exigiendo respuesta a estas violaciones de derechos humanos. Pero, ya sabemos, un hombre no es una Isla. Y pensó, ¿si todos llamáramos a la vez? ¿si se colapsara la telefonía de los consulados de Bahamas en los países? Entonces todo cobraría sentido.
Así lo hice, llamó. Y además de llamar, se gravó en video. Para que sus amigos cercanos de las redes sociales vieran y quizás se sumaran. Así fue. Algo mágico. Ese video se viralizó con más de 300 share. Más los share que se pierden en el re-copy de cada instante. Fue espontáneo, real. Sin necesidad de un líder. Sin necesidad de una personalismo, ni de culto a la figura. Porque el verdadero líder, ese que no se ajusta a los antiguos esquemas tiránicos, ni mesiánicos. Un líder de la era de la post-información es simplemente el que logra motivar a muchos líderes a replicar una acción. Tanto se replica, que el propio líder se diluye. Sino, por favor que alguien señale quien ha comenzado, específicamente, las “malditas primaveras” que están retoñando en todo el globo terráqueo. No se puede señalar. Es un conjunto. Un grupo de personas que actúan, se apoyan, proponen. Son proactivos.
Así pasó el 20/6 con #BoycottBahamas Cuban SOS. Todo comenzó a caminar. Todos a llamar.
-¿Qué crees hacemos un grupo?- dijo una.
–Claro, Genial- ¿Cómo le ponemos? Le ponemos #BoycottBahamas Cuban SOS.
Y ese grupo logró obtener más de 200 miembros en solo horas.
-¿Oye donde está fulano? Sí para que haga el cartel---¿Y fulana, puedes hacer uno tú?-
Y las llamadas continuaron.
-Espérate que esto va para el blog-
Todos de diferentes lados. Por Twitter. Emails. Imágenes. Y llamando. Llamando todo el día a los consulados. Y un video de una cubana que se grabó desde Berlin.
Y ni una sola vez, escuchen, ni un solo momento un cubano se juzgó entre sí. No importó nada. Solo que se acabe la represión de las personas que están presas en Bahamas. Llegamos a los medios de comunicación, el cartel, nosotros. Valió la pena.
El ciberactivismo y todos los ejercicios cívicos para los cubanos son bebes sociales. Falta mucho por aprender y crecer. Hace falta pasar de un ciberactivismo ilustrativo, enunciativo, argumentativo a uno pro-activo y productivo. Hace falta exprimir aún más los recursos. Esto de las llamadas recuerda a la primer era de los clásicos hackers que comenzaron, en los años 90, específicamente, con la telefonía. Pues sí, nosotros todavía estamos en unos 90 en cuanto a entendimiento de la tecnología como herramienta de presión política.  Pero no nos acomplejemos. Usemos esas limitaciones como intersticios de utilidad. Una oposición interna necesita apoyo, una oposición sin glamur como siempre digo, sufrida, explotada. Pero nosotros, la oposición externa necesita también un apoyo. ¿Y de dónde provendrá este? Pues de nosotros mismos. Porque no hay exiliados para los exiliados. No hay un allá para los de allá. No lo hay. Solo nosotros mismos para de verdad ser un poquito más efectivos.
No es gran cosa, no pretendemos que se vea como algo más de lo que fue. Pero la emoción se trasmitió. Un ejercicio cívico hermoso, de una belleza completa. No hay nombres aquí, porque no hace falta. En nuestro bajo perfil radica nuestra capacidad. Leí un libro sobre una mujer que subió al Himalaya, y contaba que lo peor no era subir sino bajar. Que la mayoría de las muertes ocurrían en la bajada no en la escalada. Eso se debía a que el alpinista al llegar a la cima, sentía la sensación de éxito y de que ya había logrado su meta. Entonces cuando descendía, la derrota lo consumía y la falta de constancia lo abrumaba. Muchos morían. Así eso. #BoycottBahama es un pico. ¿Cómo bajaremos de él? ¿Qué seguiremos haciendo para que den respuestas a los abusos de los cubanos en los centros de detención de Nassau? Si nada pasa, no importa, porque esto le sirve de ejemplo a todos los que se quieran lanzar a hacer algo por cambiar las circunstancias. Sirve para saber que esa frase de “un solo palo no hace monte” deberíamos eliminarla de nuestro argot. Pero si todo continúa, bueno, eso es un destino a recorrer. 

Pubicado por Sociedad Secreta de Cubanos libres

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